En el momento que descubres que estás embarazada, empiezan a surgir dudas que nunca antes te habías planteado. Y seguramente, si en el embarazo te han surgido muchas preguntas, cuando comienzas con la lactancia materna,…. llegará el momento en el que te hagas la pregunta de, ¿ cómo aumentar la producción de leche materna?
Asegúrate de recibir consejos de expertos en lactancia y no te dejes llevar por juicios de valor. Decidas optar por la lactancia materna o por la leche de fórmula, será tu decisión y lo mejor para tu bebé.
Te confieso que la lactancia materna es “complicada”, sobre todo si es tu primer bebé. ¿Estará tomando lo suficiente?¿Mi leche será buena?¿Le complemento con un biberón? son dudas que si no nos las hacemos nosotras, ya habrá alguien que “abra su bocaza” y las suelte.
Pues Si, Si y No hará falta. Si confías en ti y en tu peque y lo hacéis con calma y disfrutando del momento lo haréis bien. Tu bebé toma a demanda y tomará la suficiente que necesite su pequeño estómago. Tu leche no será buena, será perfecta. Y si estás disponible para él, no necesitas completar con un biberón.
Pero como en todo, siempre hay algo más que podemos hacer.
Comienza la lactancia desde el parto
Somos mamíferos y como tal la lactancia es intuitiva. Desde que el bebé nace puedes acercarlo a tu pecho y verás cómo se engancha a tu pecho. Si no se agarra bien y no succiona es normal. Tú también tienes que aprender, y aunque sea parte de nuestro instinto natural, hay que ser comprensivos, acabas de dar a luz (que no siempre es agradable), estás rodeada de gente que no conoces y cansada.
Deberás de ponerlo cuantas veces te sea posible. Al principio, si ha sido cesárea o te han dado muchos puntos, hay posturas que son más incómodas, pero iréis cogiendo práctica.
La leche tarda un poco de tiempo en salir. Eso es algo que nos preocupa mucho, pero puede tardar desde unas horas hasta una semana en salir el flujo. No te desesperes y no tires la toalla. Tu cuerpo es sabio y el de tu peque también.
Lo primero que se produce es el calostro, que será suficiente los primeros días.
Y hasta que entre los dos dominéis el arte de la lactancia, ponlo mucho sobre tu pecho, que huela, busque y disfrutar de esos momentos juntos. Lo demás irá llegando.
Descansa lo suficiente
He dicho lo suficiente, no mucho. Lo siento pero es así. Tener un recién nacido en casa no es la mejor situación para dormir del tirón. Aunque tengas suerte y el tuyo sea de los que duermen, la leche a demanda hará que no pasen más de dos horas desde que has terminado la anterior toma.
Así que déjate ayudar. Esas dos horas deben de ser para ti, para tu descanso y para tus cosas. Las tareas de la casa las puede hacer papá, acurrucar y relajar al bebé, encargarse de atender visitas, o coger el teléfono también. Sobre todo, los primero días tu peque y tú sois la prioridad absoluta.
La calidad del sueño no sólo va a influir en la cantidad o calidad de la leche, sino en tu estado de ánimo. Deberás de estar relajada y descansada para que todo fluya mejor. Y con las hormonas tan revolucionadas,….. descansa todo lo que puedas.
¿Qué comer para aumentar la producción de leche materna?
Se habla de alimentos para aumentar leche materna como la avena, las zanahorias y las nueces.
Si en tu dieta no están este tipo de alimentos, no te vuelvas loca, lo importante tanto en la lactancia, embarazo y crianza es una dieta sana y equilibrada.
Reduce el azúcar, evita refrescos, fritos y comidas muy grasas. Come muchas frutas y verduras, te aportarán mucha fibra e hidratación.
Los frutos secos pueden ser un gran aliado. Son fuentes de energía y refuerzan el sistema inmune. Al no tener que prepararlos, no vas a perder tiempo en cocinar.
No reduzcas tu ingesta de alimentos. La manera de perder peso en estos momentos no es esa. Sólo con la lactancia materna tu cuerpo irá perdiendo peso y volumen. Es el momento de de cargarlo de buenos nutrientes saludables y de buenos hábitos para ser ejemplo de tu pequeño bebé.
Agua durante la lactancia
Si ya has practicado la lactancia con otros hijos esto lo sabes muy bien. Cuando tu bebé acaba la toma (sobre todo las primeras semanas) sientes que te has quedado “seca”. No hay que ser experto para saber que el agua es necesaria y que una buena hidratación será fundamental en la lactancia.
Intenta beber mucha agua. Te sugiero que tengas cerca una botella de agua siempre que te dispongas a dar el pecho a tu bebé.
Cómo aumentar la producción de leche materna con extractor
Si el mundo de la lactancia materna y natural lo considero un arte, no os digo nada de hacer la extracción de leche. Creo que es algo que hasta que no lo experimentas no lo puedes saber. Os explico por encima para qué sirve.
Cuando extraes leche con un sacaleches, tus pechos se vacían y te sientes mucho mejor. La leche extraída servirá como reserva para darle al bebé en otro momento. Ahora bien, tienes que tener claro que no siempre es necesaria, ni posible, la extracción de leche materna.
Cuanta más leche extraigas, tu cuerpo, que es muy listo, pensará: ¿es que el bebé necesita más leche? y como prioridad absoluta que es el bebé, pues tu cuerpo va a producir más leche. Leche que a lo mejor no es necesaria, por lo menos, de momento. Puedes almacenarla y congelarla.
Alternar los pechos en la lactancia
Seguramente notes que tu peque tiene predilección por uno de tus pechos. Pero intenta siempre alternarlos. Empieza cada vez por uno distinto para que se vacíe por completo y si quiere más lo cambias al otro hasta que pare o se duerma. En la siguiente toma, comienza por ese que ha tomado último y sigue el proceso.
Esto hace que ambos pechos produzcan la leche necesaria para tu bebé.
Cómo aumentar la producción de leche materna con el piel con piel
El contacto con piel con piel, hace que se estimulen las hormonas en tu cuerpo así creas más leche materna.
Por eso es tan importante, que desde le primer momento que mace el bebé (siempre que sea posible, y suele ser casi siempre), es recomendable que lo pongas sobre tu pecho.
Ir de vacaciones por casa
¿ Sabes cómo es posible aumentar la producción de leche materna desde el descanso? Esto puede sonar tonto, pero para muchas madres , funciona muy bien. La idea de unas “vacaciones de lactancia” es que tú y tu bebé paséis un par de días viendo la tele, tomando un café en tu lugar favorito o paseando. Al estar juntos, tu bebé puede amamantar cuando quiera y tú podrás relajarte haciendo cosas que te gusten.
No sólo creará vínculo, sino que conseguirá que estés relajada y des lo mejor de ti.
La relajación es muy importante en la crianza. hay veces que es necesario hacer un descanso y respirar profundamente para poder seguir.
Tu cuerpo es sabio, el de tu bebé también. Relájate y confía en ti, en que lo estás haciendo bien y que harás lo mejor para los dos.