Tesoro congelado

Los experimentos infantiles despiertan toda la curiosidad que llevan dentro. Los experimentos con agua y sal son geniales. Son muy fáciles de hacer, rápido y limpios. Una mezcla perfecta cuando tienes peques en casa.

La actividad consiste en tener unas piezas de hielo que al descongelarse, cada una, tiene un tesoro escondido. Pero, ¿ cómo han llegado hasta allí?. Deja que la imaginación haga el resto e inventar historias de hace miles de años.

“Nosotros contamos una historia de un barco cargado de piedras preciosas rumbo a España, pero una fuerte tormenta lo desvió de su dirección y terminó en el Polo Norte, donde chocó contra un iceberg. El cascote del barco se rompió y todos sus diamantes y piedras preciosas se perdieron por el fondo del mar, convirtiéndose en pequeños bloques de hielo con formas sorprendentes. Con el paso del tiempo, las corrientes marinas y el baile de los pececillos, hicieron que esas pequeño bloques de hielo llegaran a las costas españolas. Y en un paseo por la playa en las orillas del mar Cantábrico chocaron con nuestros pies. ¡Qué maravilla! ¿ Qué brilla dentro? …”

Y desde esta mini historia comenzamos el experimento de agua y sal

Recuerda que estamos haciendo experimentos infantiles, en este caso el objetivo es que conozcan el proceso por el hielo se derrite. Incluye la explicación mientras se realiza la actividad.

Materiales

• Cubitera de hielo (si son formas divertidas mejor)
• Colorante de alimentos
• “Diamantes”
• Pipetas
• Agua
• Sal.
• Recipientes para derretir el hielo

Paso a paso del experimento con hielo

Lo primero que tenemos que hacer es tener preparados los materiales.
Hacemos varias mezclas de agua de colores. Eso lo conseguimos poniendo unas gotas de colorante en el agua. Rellenamos los moldes para el hielo. No lo cubras hasta arriba porque subirá al echarle el “diamante”. Nosotros hemos usado unos cubos traslúcidos que teníamos en casa, pero puedes usar cuentas de pulseras, bolitas brillantes, pompones,…

Ahora le toca estar en el congelador unas horas.

Cuando esté listo prepara una mezcla de agua con sal. La sal será lo que hará que el hielo se derrita mucho más rápido.

Saca los hielo de la cubitera y déjalos en el recipiente. Recuerda que se van a descongelar, así que el recipiente deberá de ser algo profundo para que no se derrame.

Ya es el momento de crear algo de misterio a la actividad mientras explicamos el proceso de descongelación a través de la sal.

Hay que coger el líquido de la mezcla de agua y sal con la pipeta e in echando sobre las piezas de hielo y observar cómo se van descongelando.

Deberás adaptar el proceso de descongelación a la edad de los niños y niñas con los que realices la actividad, pero puedes empezar explicando que la sal por sí sola no descongela el hielo, sino que cuando disolvemos la sal en agua, se cambia el punto de fusión (que el del agua cuando se congela es de 0º). Puedes aprender más aquí.

Con unas pinzas, y así seguimos trabajando la motricidad fina, irán recogiendo los diamantes y los introducirán en un recipiente.

La actividad seguirá hasta que se cansen. Seguro que luego siguen imaginando y jugando a los trasvases.

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