Sobre la unión y el apego con los recién nacidos
El vínculo y el apego de los recién nacidos se trata de responder siempre a las necesidades del bebé con amor, calidez y cuidado. Cuando haces esto, te conviertes en una persona especial y de confianza en la vida de tu bebé.
El vínculo entre usted y su recién nacido es una parte vital del desarrollo .
Por ejemplo, cuando su recién nacido obtiene lo que necesita de usted, como una sonrisa, un toque o un abrazo, siente que el mundo es un lugar seguro para jugar, aprender y explorar. Esto le da la base para el bienestar emocional y la capacidad de hacer frente a los contratiempos más adelante en la vida. El vínculo y el apego también ayudan a su bebé a crecer mental y físicamente . Por ejemplo, el contacto humano repetido, como tocar, abrazar, hablar, cantar y mirarse a los ojos, hace que el cerebro de su recién nacido libere hormonas. Estas hormonas ayudan al cerebro de su bebé a crecer. Y a medida que su cerebro crece, comienza a desarrollar la memoria, el pensamiento y el lenguaje.
Comprender el apego de los recién nacidos
Su recién nacido utiliza el lenguaje corporal para decirle cuando necesita algo, por ejemplo, una comida o un cambio de pañales. También usará el lenguaje corporal para mostrarte cuándo quiere conectarse contigo y fortalecer tu vínculo. Puede que lo haga:
- sonreírte o hacer contacto visual – a los bebés les encanta mirarte a los ojos
- hacer pequeños ruidos, como coos o risas
- se ven relajados e interesados
- llorar.
Cuando su bebé necesite un descanso o tal vez un enfoque diferente y más suave, puede que lo haga:
- mira a otro lado, cierra los ojos o bosteza
- tratar de luchar o alejarse
- se ven tensos e inquietos
- llorar.
Cuando aprendes a “leer” los mensajes de tu bebé y a responder de la manera correcta, lo animas a comunicarse más. Esto es bueno para su vínculo y también ayuda a su bebé a aprender sobre la comunicación, el comportamiento y las emociones.
Cuando note las señales y el lenguaje corporal de su bebé y responda siempre de forma cálida y cariñosa, se sentirá más seguro. Esto le ayuda a construir una relación fuerte con su bebé.
Cómo crear el apego de los recién nacidos
El vínculo con su recién nacido a través de un afecto cálido y suave la hace sentir segura. Aquí hay algunas ideas:
- Toca y acaricia regularmente a tu recién nacido. Intenta acunarlo o sostenerlo contra ti, piel sobre piel. O acarícialo suavemente cuando le cambies el pañal o lo bañes.
- Responde al llanto. No siempre podrá saber por qué su recién nacido está llorando. Pero al responder, la estás ayudando a sentirse segura.
- Haga que su recién nacido se sienta físicamente seguro. Proporcione un buen apoyo para la cabeza y el cuello cuando sostenga a su bebé. Envolver a su bebé recrea la sensación de seguridad de estar en el útero.
Puedes crear un vínculo con tu recién nacido dándole cosas que mirar, escuchar y sentir. Esto hace que su cerebro funcione y lo hace crecer. Pruebe estas ideas:
- Hable con su recién nacido tan a menudo como pueda en tonos tranquilizantes y reconfortantes. Podrías hablar de lo que estás haciendo, o contar historias. Esto ayuda a que su bebé aprenda a reconocer el sonido de su voz. También le ayudará a aprender el lenguaje cuando sea mayor.
- Cantar canciones. A su recién nacido probablemente le gustará el sonido de las canciones y la música, así como el ritmo. La música relajante podría ayudarle a él, y a usted, a sentirse más tranquilo. A su recién nacido no le importará si ha olvidado la letra o la melodía.
- Mira a tu recién nacido a los ojos mientras hablas y cantas, y haces expresiones faciales. Esto le ayudará a aprender la conexión entre las palabras y los sentimientos.
- Estimula el sentido del tacto de tu recién nacido. Desde el nacimiento, su recién nacido puede sentir hasta el toque más suave. Intente acariciar suavemente sus pies con una tela suave mientras le cambia el pañal. Y hable de ello – por ejemplo, “¿Se siente suave?”
Cuando la unión y el apego no es fácil
Puede que te hayas unido a tu bebé la primera vez que la viste. Pero está bien y es normal si no sentiste una conexión instantánea . El vínculo y el apego pueden a veces llevar semanas o meses de conocer y comprender a su bebé.
Aquí hay algunas sugerencias para ayudar a que su vínculo se desarrolle:
- Tómese un tiempo para disfrutar de estar con su bebé. Cuidar de un nuevo bebé puede ser una tarea difícil, pero es bueno pasar tiempo sólo estando juntos. Por ejemplo, podrías sostener a tu bebé cerca y leerle en una voz de canción. Le encantará escuchar su voz, incluso si está leyendo su revista o periódico favorito.
- Vea el mundo desde la perspectiva de su bebé. Imagine lo que está mirando, sintiendo o tratando de hacer. Descubra lo que realmente le gusta y lo que no le gusta. Por ejemplo, ¿es un bebé sociable al que no le importa que lo pasen en la familia? ¿O prefiere ver lo que pasa desde la seguridad de sus brazos?
- Sé flexible. La mayoría de los recién nacidos no tienen patrones definidos de sueño diurno y nocturno. Esto significa que no es realista esperar que su recién nacido siga una rutina estricta. Lo mejor es responder cuando su bebé quiera alimentarse, dormir o jugar.
Eres la parte más importante de la vida de tu bebé. Si te preocupa la relación con tu bebé, pide ayuda. Obtener ayuda cuando su bebé es joven puede marcar una gran diferencia para ambos. Si la necesita, busque apoyo: si está bien física y mentalmente, estará más capacitada para proporcionar el amor y el consuelo que su bebé necesita.
Vinculación con más de un cuidador
Su bebé forma sus principales vínculos con las personas que más lo cuidan, como usted y su pareja, si tiene una. También puede formar lazos con otras personas que le cuidan regularmente y con amor y le hacen sentir seguro. Estas personas pueden incluir a los abuelos de su bebé, cuidadores remunerados y niños mayores.
El vínculo con más de una persona ayuda a su bebé a aprender sobre la confianza y la cercanía con la gente . También puede facilitarles a usted y a su pareja otras cosas, como el trabajo remunerado, la compra de alimentos y las tareas domésticas. También puede darte un descanso de ser un cuidador.
En muchas culturas, muchos miembros de la familia y la comunidad participan en la crianza de los niños, y los bebés forman vínculos con muchas personas.